Gabriel Simonet, indeed

Cayó en mis manos recientemente «The Book of General Ignorance«.

Fue interesante recibirlo, aunque un poco descorcentante. Normalmente consideraría que mi nivel de ignorancia es muy alto (de nivel terciario, o sea que MUY entrenado en ignorancia) y que no necesitaría un libro para alimentar ese tan bien formado aspecto de mi caracter.

Fue leer el prólogo para comprender que no sólo no sé nada (sé que sé menos que un infinitésimo de nada), sino que ni siquiera ignoro el orden de magnitud de todo lo que no sé.

El libro consta de 230 respuestas a 230 preguntas (y una pregunta sin responder que nadie cuenta).

«Will this do, Stephen?»

Una de las introducciones al libro.

Normalmente las preguntas parecen inocentes y de respuesta evidentemente obvia, pero nunca lo son, siempre es nuestra ignorancia la que habla (con voz de sabelotodo, claro). El resultado de la lectura es certero, entretenido y profundamente removedor. Es un excelente viaje para el autoconocimiento:

Un primer escalón en la espiral descendente al conocimiento de nuestra propia ignorancia y un gran estímulo a nuestra curiosidad dormida.